La esperanza es sinónimo de renuevo en nuestra vida, y es el señor Jesús la esperanza de todos los términos de la tierra, es por esto que en medio de las dificultades que podamos vivir, abrazar la esperanza es poner siempre los ojos en Él, en sus manos sabemos que siempre la prueba nos renueva" Fragmento libro "El Renuevo".
Nuestra constancia en la oración siempre debe ir acompañada del esfuerzo en nuestro trabajo, porque aquel que es constante en la esperanza trabaja arduamente. Su oración es consistente y acompañada de su constancia en el trabajo, el cual lo hace siempre con amor pues entiende la presencia del Espíritu Santo en su vida y cómo se manifiesta a través de todo lo visible, lo que tiene disponible para trabajar y lo que se le ha encomendado para transformar." Fragmento libro "Consagración".